Читаем Adiós Muchachos полностью

No; ningún cargo tenía en su conciencia de madre. Ni le remordía el haberla ayudado con tanto entusiasmo. La propia Alicia le había confesado que, mientras no fuera con tipos desagradables, el ejercicio de la putería le gustaba, era estimulante, divertido.

¡Qué otra cosa podía hacer Margarita! Como contribución adicional, había sacrificado a Carlos, su último querindango, que hacía unos meses vivía con ellas en la casa. Una lástima. Era bueno en la cama, tranquilo, suficientemente enamorado para complacer a Margarita en todo lo que estuviera a su alcance, y sin jamás haberse puesto a joder con reclamos de atención y escenas de celos. Pero era tan poco lo que podía ayudar…

Y lo botó sin explicaciones.

– ¡Nada! Que me cansé y punto. ¡Dale! Recoge y vete.

Evidentemente, Carlos sobraba para el proyecto de Ali; proyecto razonable, por otra parte; y ya que así lo había decidido la niña, manos a la obra. Y sin demora; porque aquel culo, la piel de veintitrés años y sus agallas, no le iban a durar toda la vida.

El recurso de ofrecerse pedaleando, y buena parte de las artimañas para seducir y esquilmar clientes, habían sido creatividad de la propia Alicia; pero Margarita, como Isabel de Castilla, había creído en el proyecto, y vendió su última joya para adquirir una bicicleta en dólares.

– Ahora o nunca -había dicho Alicia cuando fue a comprarla.

"Por su culpa…", se dijo Margarita, y recordó con inquina a su ex marido. Y a Gorbachov, el calvo hijueputa ese, que había venido a joderlo todo.

De no haber ocurrido el colapso de la Unión Soviética, en Cuba no habría Período Especial. Quizá Alicia hubiese terminado su carrera; y seguramente se habría conseguido un marido dirigente, tecnócrata o artista, como era su aspiración juvenil. Pero ya en el 94, cuando la crisis afectaba los estómagos, los pies, la conciencia, hasta ahí llegó el patriotismo de Alicia y escogió hacerse puta.

– ¡Sí, puta, puta! ¡Claro que sí, chica! -había insistido la niña.

Generalizados los apagones y la distribución de un panecillo por persona, Alicia hizo varios intentos honestos por conseguirse un extranjero rico, que la sacara del país y la pusiera a vivir como ella quería. Aducía tener una sola vida y gustos caros. Y esos gustos quería dárselos en esta única vida y cuanto antes.

En dos ocasiones, durante los años 94 y 95, sus intentos honestos estuvieron a punto de dar resultados, pero a último momento fracasaron.

Llegó, pues, el día en que Alicia decidió hacerse puta.

Ni un discurso más: si veía a Fidel en el televisor, lo apagaba. Al carajo con la moral y los principios. Sí, puta.

Margarita tuvo que estar de acuerdo. No hubiera podido impedírselo. Y con profusas lágrimas reconoció que de haber tenido veinte años menos, ella habría hecho lo mismo.

– Pobre hija mía…

– ¡Qué pobre ni un carajo! A llorar a la iglesia.

Ni Alicia ni la madre habían sido nunca gusanas.

Margarita, nacida en el 48, había estudiado pintura en San Alejandro durante la década de los sesenta, y luego, un par de semestres de la Licenciatura en Historia del Arte. Siguieron el matrimonio y los viajes. Con Germán, funcionario de Comercio Exterior, casi dos décadas mayor que ella, había vivido cinco años en Bélgica y tres en Inglaterra. Margarita provenía de la vieja burguesía habanera; pero por seguir a Germán, hombre viril, hermoso, patriota y fidelista, había desertado de su familia ricachona, emigrada a Miami desde 1960, y había acompañado sinceramente el proceso revolucionario. Siempre desde posiciones muy cómodas, claro; pero lo había acompañado.

Al regreso, había trabajado en un museo, y desde hacía diez años en el Ministerio de Comercio Exterior, como secretaria primero y en protocolo después. En aquel ambiente liberal y cosmopolita del trato con extranjeros, Margarita se encontraba en su medio. Y aunque durante muchos años se tuviera por revolucionaria, su patriotismo y convicciones flaquearon cuando en el 91 Germán la dejó por otra, veinte años más joven.

Desde entonces, Margarita y Alicia perdieron muchos de los privilegios que emanaban de él. Eso sí, les dejó la casa de Miramar, con dos plantas, cinco cuartos, antejardín, patio trasero con árboles, garaje, y el viejo Triumph que trajeran de Inglaterra, fundido irremisiblemente desde hacía dos años.

Así pues, mientras Alicia no tuviera un cliente fijo a quien dedicarse durante varios días, salía a cazar en bicicleta. Y en tanto no enganchara a nadie, pedaleaba siete días por semana, de diez a doce y de cuatro a seis.

Su técnica era única en La Habana.

Y la prueba de que daba resultados, es que a pocos meses de haberse iniciado, había obtenido ya cuatro propuestas en firme para una relación estable en el exterior: Panamá, Argentina, Alemania, Italia.

Перейти на страницу:

Похожие книги

Утес чайки
Утес чайки

В МИРЕ ПРОДАНО БОЛЕЕ 30 МИЛЛИОНОВ ЭКЗЕМПЛЯРОВ КНИГ ШАРЛОТТЫ ЛИНК.НАЦИОНАЛЬНЫЙ БЕСТСЕЛЛЕР ГЕРМАНИИ № 1.Шарлотта Линк – самый успешный современный автор Германии. Все ее книги, переведенные почти на 30 языков, стали национальными и международными бестселлерами. В 1999–2023 гг. снято более двух десятков фильмов и сериалов по мотивам ее романов.Несколько пропавших девушек, мертвое тело у горных болот – и ни единого следа… Этот роман – беспощадный, коварный, загадочный – продолжение мирового бестселлера Шарлотты Линк «Обманутая».Тело 14-летней Саскии Моррис, бесследно исчезнувшей год назад на севере Англии, обнаружено на пустоши у горных болот. Вскоре после этого пропадает еще одна девушка, по имени Амели. Полиция Скарборо поднята по тревоге. Что это – дело рук одного и того же серийного преступника? Становится известно еще об одном исчезновении девушки, еще раньше, – ее так и не нашли. СМИ тут же заговорили об Убийце с пустошей, что усилило давление на полицейских.Сержант Кейт Линвилл из Скотланд-Ярда также находится в этом районе, но не по службе – пытается продать дом своих родителей. Случайно она знакомится с отчаявшейся семьей Амели – и, не в силах остаться в стороне, начинает независимое расследование. Но Кейт еще не представляет, с какой жутью ей предстоит столкнуться. Под угрозой ее рассудок – и сама жизнь…«Линк вновь позволяет нам заглянуть глубоко в человеческие бездны». – Kronen Zeitung«И снова настоящий восторг из-под пера королевы криминального жанра Шарлотты Линк». – Hannoversche Allgemeine Zeitung«Шарлотта Линк – одна из немногих мировых литературных звезд из Германии». – Berliner Zeitung«Отличный, коварный, глубокий, сложный роман». – Brigitte«Шарлотте Линк снова удалось выстроить очень сложную, но связную историю, которая едва ли может быть превзойдена по уровню напряжения». – Hamburger Morgenpost«Королева саспенса». – BUNTE«Потрясающий тембр авторского голоса Линк одновременно чарует и заставляет стыть кровь». – The New York Times«Пробирает до дрожи». – People«Одна из лучших писательниц нашего времени». – Journal für die Frau«Мощные психологические хитросплетения». – Focus

Шарлотта Линк

Детективы / Триллер
Агент на месте
Агент на месте

Вернувшись на свою первую миссию в ЦРУ, придворный Джентри получает то, что кажется простым контрактом: группа эмигрантов в Париже нанимает его похитить любовницу сирийского диктатора Ахмеда Аззама, чтобы получить информацию, которая могла бы дестабилизировать режим Аззама. Суд передает Бьянку Медину повстанцам, но на этом его работа не заканчивается. Вскоре она обнаруживает, что родила сына, единственного наследника правления Аззама — и серьезную угрозу для могущественной жены сирийского президента. Теперь, чтобы заручиться сотрудничеством Бьянки, Суд должен вывезти ее сына из Сирии живым. Пока часы в жизни Бьянки тикают, он скрывается в зоне свободной торговли на Ближнем Востоке — и оказывается в нужном месте в нужное время, чтобы сделать попытку положить конец одной из самых жестоких диктатур на земле…

Марк Грени

Триллер